Durante mi estancia en Casa Churchill en Claverol, pude disfrutar de una atención exquisita por parte del propietario, quien estuvo pendiente de todas nuestras necesidades y nos brindó toda la ayuda que solicitamos. Las habitaciones y las zonas comunes se encontraban impecablemente limpias, además de ofrecer unas vistas inmejorables. La oferta gastronómica fue otro punto a destacar, ya que ofrecen productos locales y adaptaron la dieta para veganos, lo cual fue muy apreciado. Sin duda, recomendaría este lugar a aquellos que busquen un entorno natural para desconectar, alejado de todo pero bien comunicado con otras poblaciones más grandes.

Si tuviera que mencionar algo que mejorar, diría que mi habitación estaba situada encima de la piscina y se podía escuchar cuando las personas estaban dentro. Afortunadamente, durante la noche nadie se bañaba, así que no fue un problema.

Ubicación perfecta con paisajes preciosos

Atención genial de Andreu, el anfitrión. Recomendaciones de sitios para visitar y restaurantes.- Habitación limpia y cómoda con detalles cuidados.- Maravillosas cenas y desayunos.- Vistas espectaculares al pantano.- Casa acogedora con zonas comunes y piscina privada.- Flexibilidad en la oferta gastronómica

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Nos sentimos como en casa debido a la atención del personal.

Nada que mencionar.

La atención excelente, habitación amplia y cómoda, vistas espectaculares, cena deliciosa, piscina refrescante y encanto en el lugar.

Nada.

La ubicación de este hotel es inmejorable, ofreciendo vistas espectaculares al embalse y al paisaje circundante. Las habitaciones son espaciosas y decoradas con muy buen gusto. La limpieza es impecable y el servicio es atento y amable. Además, el desayuno y la cena son deliciosos, con ingredientes frescos y platos bien elaborados. destaca la piscina climatizada, ideal para relajarse.

Algunos huéspedes mencionaron que durante su estancia había obras cerca del hotel, lo cual generaba ruido y afectaba la tranquilidad y la desconexión que buscaban.

Me gustó el amplio espacio de la habitación y las impresionantes vistas al pantano desde el pequeño balcón. La cama era enorme y muy cómoda. El pueblo en el que se encuentra el hotel es tranquilo y perfecto para desconectar durante las vacaciones de Navidad. disfruté de la acogedora casa, especialmente de las zonas comunes con revistas, juegos y libros. Además, la cena y el desayuno eran deliciosos, con productos locales y un servicio atento por parte del personal.

Lo que menos me gustó fue que la habitación que me asignaron era algo discreta, esperaba una mejor vista o más comodidades. Además, desafortunadamente no tuve la oportunidad de disfrutar de la piscina climatizada, habría sido genial poder relajarse en ella durante el invierno.

El lugar tranquilo, la atención generosa, la comida deliciosa, la comodidad de la habitación y las vistas espectaculares. Los anfitriones excelentes.

No hay nada malo que decir.

La ubicación con vistas increíbles, desayunos y cenas caseros, amables anfitriones, aceptan mascotas.

Nada en absoluto de lo que quejarse.

Volveremos a Casa Churchill! Pasamos unos días maravillosos disfrutando de un desayuno buffet delicioso, una cómoda cama XL con vistas espectaculares y una piscina climatizada con total privacidad. Además, las cenas fueron exquisitas con productos locales. Recomendamos las rutas de trekking recomendadas por los dueños.

Habitación cómoda y limpia. Vistas preciosas al lago.Anfitriones amables y simpáticos.Comidas deliciosas y sin gluten.Ambiente tranquilo y relajante.Información útil de los alrededores.Piscina refrescante.Encanto del lugar.

Nada de nada.

La ubicación de este lugar es impresionante, con vistas espectaculares que nutren el alma. Además, el alojamiento ofrece comodidad y relajación, con una piscina interior acogedora y abierta las 24 horas del día. se destaca el servicio amable y el respeto hacia las mascotas, lo que lo convierte en una excelente opción para parejas que viajan con sus peluditos.

Sería bueno que tuvieran un espacio designado para comer con las mascotas en invierno, ya que puede resultar incómodo comer en la habitación o en el tercer piso.

La estancia en este hotel fue simplemente maravillosa. El personal nos trató con mucha amabilidad y generosidad, asegurándose de que nuestra estancia fuera placentera en todo momento. Disfrutamos de unas vistas espectaculares y de un entorno natural único. Además, la limpieza del hotel era impecable y las instalaciones eran de alta calidad. El desayuno era excelente, con una gran variedad de opciones y servido con mucho detalle. Sin duda, recomendaríamos este hotel a cualquiera que visite esta ciudad.

Nada, es perfecto.